jueves, noviembre 30, 2006

Ausencia

Podría contar que en este último mes no he escrito porque andaba deprimida, porque estaba liada descubriendo la vacuna contra el sida, porque he tenido que enterrar a mi canario, porque he sido abducida por los extraterrestres.... Pero no, simplemente, me he escapado unos días a Roma. La historia es la siguiente, mi estado de desesperación con la tesis es tal, que solo tenía dos opciones:

1. Matar a mi directora
2. Irme de viaje y olvidarme de todo

Mi buen juicio decidió que lo mejor era pirarme de aquí, por el bien de las dos.

Aunque ya conocía esta ciudad, aproveché que una amiga anda por allí y así me ahorraba eso del hospedaje. Y no me equivoqué con la elección. Roma sigue siendo tan especial como hace dos años. Ahí dejo algunas fotillos para que os hagáis una idea.




Y en cuanto a los italianos ¿¿¿¡¡¡qué puedo decir!!!??? Tuve que hacer verdaderos esfuerzos para no tirarme al cuello de alguno... ¡¡¡¡Aisssss!!!!¡¡¡¡Qué duro es esto de tener conciencia!!!!!

Pero bueno, que ya ando por aquí, cogiendo fuerzas para seguir con lo mío mientras vuelvo a desempolvar el bazoca, quien sabe si lo necesitaré en breve....

Escuchando: Train, Sonya Kitchell