Piticlín, piticlín (suena el teléfono. Al otro lado, una de mis mejores amigas, a la que llamaré Sofia)
- Paranoica: ¿Qué tal nena?
- Sofía: Me ha escrito un correo…..
Y se hizo el silencio. El miedo empieza a correr por mis venas porque intuyo que no son buenas noticias. En este tipo de cosas nunca lo son.
Si mi suerte con los hombres es para cortarse las venas, la que tiene Sofía es para tomarse directamente una caja de barbitúricos y morir tranquilamente mientras alucinas en colores (al menos que te vas para el otro barrio que sea flipando ¿no?).
Hace unos cuantos años, su novio de toda la vida la abandonó para irse con una siesa, que según él, era la mujer de su vida. Pues bien, la susodicha, tiempo después, le dio un buen puntapié y le mandó a freír monas (Nota al pringaete: Chaval, si esa era la mujer de tu vida, siento decirte que estás bien jodido, pues te has condenado a vivir una lamentable existencia en la más amplia soledad. Y es que majete, donde las dan, las toman).
Y después de la depresión monumental, de años de andar single por la vida, encontró otro muchacho que estaba de muy buen ver. La cosa prometía y el amor parecía regurgitar de entre las baldosas…. hasta que apareció la novia muerta. Porque en esta historia tenemos fenómenos paranormales, para que no se diga que esta amiga mía no es original. Al parecer, años atrás, este personajillo estuvo saliendo con una linda mujer, perfecta toda ella, con la que tenía planeado hasta la boda… Más el destino quiso separarles y Dios se la arrebató de entre su regazo (hasta aquí se pueden oír los ohhhhh de lástima que nos da!!!). El shock fue tal que, desde entonces, cada vez que encontraba a una mujer “tan maravillosa” como la que desapareció (en este caso mi pobre amiga), tenía que abandonarla, porque el espectro de la novia despechada le perseguía y le atormentaba…..Y esa fue su explicación para dejar a Sofía con dos palmos de narices. Y es que ya se sabe, ante una novia muerta nada se puede hacer.
Y siguieron pasando los años, hasta que de nuevo apareció otro galán en la vida de Sofía. Como la vida se está poniendo fatal para las solteras, el primer paso fue hacerse su amante, porque ya no se estila eso de ir cantando bajo las ventanas para rondar a las mozas. Los meses fueron pasando, y pasando, y pasando, hasta que llegaron a un punto en el que había que definir un poco mejor lo que había, o se da un paso más o se rompe el canibalismo sexual. El pareció encantado con la idea, y en esta fecha estival ya se sabe, se tomó unos días de vacaciones para viajar al pueblo y reunirse con esa parte de la familia que hace tanto tiempo que no ve. Los días se acumulaban y no había noticias del buen mozo. “Se habrá caído por un acantilado y anda agonizando con la pierna quebrada, o se habrá estropeado el satélite que rige los móviles en su pueblo, o más bien ha sufrido una alienación y los marcianitos verdes se lo han llevado para hacer raros experimentos con su cuerpo” le comentaba a mi amiga para que el ánimo no decayera.
Hoy, tras tres semanas de silencio rotundo, ha recibido un e-mail (los satélites no funcionan pero “el internete” nunca falla), en el que decía textualmente lo siguiente (entre paréntesis los pensamientos, supongo, de mi amiga):
“Querida Sofía:
Acabo de llegar del pueblo, porque al final he decidido quedarme más días (vaya, ¿pero no decías que tenías mucho curro y que por eso no podías irte conmigo?). Imagino que esto te lo debería decir a la cara (para eso tendrías que ser un hombre primero) o por el móvil (¡¡¡¡anda!!! ¿no me digas que el satélite no se cayó al final?), pero bueno, como sabes que no tengo demasiada facilidad de palabra (aunque sí que tienes mucha facilidad para otras cosas ¿eh rapidín?), he pensado (¿pero piensas realmente?) que es mejor decirlo por aquí (eso, con dos cojones chaval).
He conocido a una amiga en el pueblo (seguro que ahora llega el culebrón), bueno conocido no (¿te aclaras o qué?), la conocía desde hace muchos años en mi pueblo, estuvimos juntos unos meses hace un montón de años cuando yo tenia 26 o 27, luego ella se fue a estudiar a Vigo su familia era de allí, se echo novio y no la había vuelto a ver (lo que yo decía, la historia de su vida), hace 2 fines de semana apareció, yo ya casi ni la conocía (me imagino, estará ahora como una vaca) ella a mi si.... bueno estuvimos hablando (¿sólo hablando?), se quiere venir a Madrid (déjame adivinar ¿de okupa en tu casa?)... y me gustaría volver a intentarlo (apaga y vámonos), es una persona muy especial para mi (bla, bla, bla), quizás la persona que mas he compartido y más parecida a mí que he encontrado en mi vida (otro con la mujer de su vida, veamos cuanto le dura), en cuanto a música, forma de ser (bla, bla, bla), en fin todo...
Me dirás que para que te cuento todo esto (eso digo yo), no lo sé la verdad, dirás que a ti no te interesa (si a veces puedes llegar a ser listo y todo), pero tengo claro que en ningún momento quiero hacerte daño, ni engañarte (¿y esto como se llama en tu pueblo?)
…… a partir de ahí frases tipo “Eres una mujer excepcional”, “lástima no haberte encontrado antes”, bla, bla, bla, para finalizar de una manera apoteósica…….
Espero que seas muy feliz y que quizás algún día puedas entender este paso que doy, es increíble que después de estar un montón de tiempo si conocer a nadie, justamente ahora conozca a las 2 mujeres mas interesantes que he conocido en mucho tiempo. No se como te lo tomarás...”
Pues bien chavalito, me lo he tomado de maravilla, salto de emoción y las orejas me dan palmas de alegría……
Y es que yo ante estas historias me quedo sin palabras. Al menos, en esta ocasión, contamos con una novia resucitada y no muerta, que eso de que no pertenezca a la otra dimensión nos da un pequeño respiro, ya que siempre será más fácil luchar contra seres de carne y hueso que contra fantasmas.....Aunque sinceramente, a mí me da que va a ser que no….. Las ganas son pocas y el espíritu menor.
Y vosotros ¿me contáis algo de vuestras historias paranormales con los ex?
martes, agosto 22, 2006
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