lunes, diciembre 31, 2007

Ciao Ciao 2007


Hoy se nos termina el año y antes de que expire su último aliento, me gustaría hacer un pequeño resumen de lo que han significado estos 365 días para mí.

Comencé enero en el paro y totalmente desesperada porque mi tesis no avanzaba lo más mínimo. Aunque estaba escrita en su totalidad desde noviembre, las que eran mis directoras de tesis no se ponían a corregirla. Sí, en más de una ocasión pensé en matarlas, y por aquella época tenía sueños de lo más gore, en los que me dedicaba a cortar yugulares con un bisturí de lo más afilado. Fueron buenos tiempos, sí señor, lástima que no me diera por escribir una novela de terror.

Como los meses iban pasando, el paro se iba acabando y era imposible encontrar nada de lo mío, decidí hacer unos cursos de programación al comprobar en las distintas páginas de empleo que era de lo que más se ofertaba en el mercado. Yo, que soy una negada para la informática, allí me planté para ver que se cocía. Debe ser que andaban muy desesperados, porque al poco tiempo una empresa me contrató para que me pusiera a gestionar cuentas bancarias mediante COBOL, un lenguaje informático de la era del pleistoceno y del que yo no había oido hablar en mi vida. Es curioso que empezara el año en el paro y en los tres últimos meses haya pasado por tres empresas diferentes, la última gracias al cielo, no tiene nada que ver con la programación. De mi experiencia laboral en este campo he recogido grandes amistades, que espero no se pierdan con el tiempo, y he vivido en primera persona la famosa explotación de este sector, que me llevó a librar épicas batallas para conseguir unos días de vacaciones.

A nivel sentimental, 2007 ha sido un año de grandes peleas y mejores reconciliaciones con Maromo. Piedra a piedra hemos ido construyendo una relación de la que me siento la mar de orgullosa, de la que incluso algunos amigos han vaticinado una posible boda en el futuro (aunque con augurios así no sé si debería llamarles amigos). Sea como fuere, este año ha estado cargado de amor y de cariño, lo cual yo me alegro y espero continúe en el futuro.

En cuanto a mi gente, los importantes han seguido a mi lado y he conseguido unas cuantas adquisiciones que (leer con voz gangosa) "me llenan de orgullo y satisfación". La pérdida más significativa ha venido de la mano de Gael, de cuya existencia hace meses que no tengo noticias. No siempre se puede ganar, pero he de confesar que echo muchísimo de menos sus conversaciones y su forma de ver la vida.

Y si por algo recordaré siempre este año, será sin duda por la lectura de mi tesis doctoral. Años de trabajo y sufrimiento dieron por fin sus frutos y conseguí deshacerme de ese saco de piedras que me estaba destrozando las lumbares. Nunca olvidaré las lágrimas de Sofia, mi hermano y mi madre, pero sobre todo en mi recuerdo permanecerá siempre aquella sensación de triunfo visceral. Por primera vez en mucho tiempo, mi deseo tras las uvas de esta noche no será eso de "por favor, que sea este año el de la lectura". Desde aquí, toda mi fuerza y ánimos para aquellos que algún día pensaron que hacer una tesis doctoral estaría bien, al final acabarán viendo la luz como yo la vi en septiembre (¡¡¡¡ánimo Nachete!!!!)

Por último, en este año Doña Paranoica y sus Historias ha crecido de manera vertiginosa, gracias a todos los que pasáis por aquí y dejáis vuestra huella. Con gente como vosotros ¿quien no escribiría un blog?. Gracias miles por haberme acompañado durante todo el año y haber compartido conmigo todas vuestras vivencias y paranoias varias.

Sí señor, este ha sido un gran año, lo que corrobora una vez más mi estúpida teoría de que los años impares se me dan especialmente bien. Siendo el 2008 un año par, y encima bisiesto, ¿arderé finalmente en el infierno?..... Espero que no, pero si es así, solo pido que tenga conexión a internet para seguir disfrutando de todos vosotros.

Y como no podría ser de otro modo, ahí os dejo un video para que os echéis unas risas y comprendáis mejor lo que ha significado para mí este 2007.




A todos vosotros

sábado, diciembre 29, 2007

Carrie vs Bridget


Una de las cosas más bonitas que tiene el amor es aquello de compartir. Maromo es un ser enclenque que pilla todos los viruses del mundo mundial. Yo, mujer entrada en carnes, consigo resistir al ataque de la mayoría, hasta que aparece uno virulento que me deja sin sentido. Y en ese proceso me encuentro en estos momentos, intentando destruir a ese bichejo infernal que me ha prestado por unos días mi amorcito. Aissss, lo dicho, que bonito es compartir.

Después de hacer varios recados esta mañana y ver que la fiebre no me daba cuartel, me he atrincherado en mi habitación y he organizado un súper maratón de pelis y series televisivas. Tras varios capítulos de Sexo en Nueva York, he decidido cambiar a Carrie y sus amigas por una espectacular Bridget Jones. Y es que tanto cuerpo escultural me ha sumido en la más absoluta de las depresiones y he sentido la necesidad de tener contacto con algún personaje mucho más parejo a mí, es decir, una fumadora empedernida con carnes suficientes como para abastecer a media Africa y con una existencia de lo más desastrosa.

Mientras visionaba la peli y recuperaba mi buen humor, he caído en cuenta de que aun no había hecho mi "Lista de propósitos" para año nuevo, así que me he puesto manos a la obra:

- Dejar de fumar: Para que engañarnos, todos sabemos que para conseguir algo así hay que estar psicológicamente muy bien concienciado, y yo no tengo ganas ni tiempo para ello. Además, sigo opinando que solo podré dejarlo el día que me quede embarazada, y como no es el caso..... ¡¡¡¡Fuera de la lista!!!!

- Apuntarme a un gimnasio: Experiencias de años anteriores me han demostrado que la matrícula vale una pasta y luego no soy capaz de ir más de dos días seguidos. Al tercer mes ando cagándome en todo lo que se menea por el dineral que he tirado por el retrete. Así que....... ¡¡¡¡¡¡Fuera de la lista!!!!

- Intentar tener mejor carácter: Estaría bien conseguir ser una persona más amable, tierna, cariñosa y altruista. Mi chico se llevaría una grata sorpresa pero ¿de qué narices escribiría?. No, no puedo hacer eso a mi público, así que ...... ¡¡¡¡Fuera de la lista!!!!!

- Perder peso: Tras escuchar en los últimos días diversos comentarios de lo más punzantes sobre mis voluptuosas curvas (y es que suegra no hay más que una), no estaría mal tomar conciencia de que 90 kilos en una persona de 1.60 rozan el límite de la insalubridad recogida por las autoridades sanitarias. Como lo de hacer deporte ha quedado descartado en el segundo punto, no queda otro remedio que consultar a un especialista para que me prescriba una dieta de esas que tanto odio, la cual nunca ofrece los resultados esperados (a no ser que la mala leche que se me pone sea uno de ellos). Y es que en mi caso, a parte de una devoción incondicional por el chocolate, poseo una genética que viola todas las leyes de la delgadez, y contra eso señores, es muy difícil luchar. Pero visto lo visto, y remitiéndonos al hecho de que todos los demás propósitos están descartados, voy a tener que intentar cumplir este. Eso sí, después de Reyes, que a mí un buen trozo de roscón mojado en chocolate caliente no me lo quita ni San Pedro Bendito. Aisssss, me muero por ver la cara que pondrá Maromo tras superar mi primer mes de régimen, porque lo único que pierdo en mis dietas son tallas de sujetador, no de otra cosa, y no sé si eso a él le hará tanta ilusión como a mí.

En fin, que ese va a ser mi único propósito para el año que comienza. Y vosotros ¿qué propósitos os habéis planteado?


- Escuchando: The Smiths & Morrisey - The more you ignore me

- Frase del día: "El verdadero heroísmo está en transformar los deseos en realidades y las ideas en hechos" - Alfonso Rodríguez Castelao

viernes, diciembre 28, 2007

El euribor, el tae y otras miserias......

En pleno velorio de mi Lolo querido, realicé un estudio de mercado para tomar una decisión sobre mi futuro automovilístico. Sofía me comentó que ya era hora de darme un capricho y comprarme un coche nuevo. Maromo, socio honorífico de la cofradía del puño cerrado, me indicó que no estamos para tirar la casa por la ventana y que no sería mala idea eso de aprender a motar en patinete. El cardiólogo de Lolo, es decir, el Mecánico eterno, me dijo que comprar un coche de segunda mano es un negocio muy arriesgado si no conoces al antiguo dueño y que además, para que aguante toda la traya que yo le meto, ha de tener como máximo 4 ó 5 años, con lo que me recomendó que por un poquito más de dinero me comprara uno nuevo y me dejara de gilipolleces.

Con estas ideas en la cabeza, comencé el mes de diciembre mirando concesionarios. Presupuesto máximo para la inversión: 12000 euros, y con este despliegue de medios tan brutal las posibilidades de compra con las que contaba no eran muchas. Para colmo, descubro que el plan renove finaliza este año, con lo que había que tomar una decisión lo antes posible.

Rauda y veloz, me dirigí a un banco cualquiera a pedir información sobre los créditos personales: "¿Euribor? ¿TAE? ¡¡¡pero de qué narices me estás hablando!!!! ¡¡¡¡yo solo quiero un coche!!!". El caso es que con la miseria de sueldo con el que he vivido en este último año y con el hecho de que he pasado por tres empresas diferentes en los tres últimos meses, todos los señores banqueros me han puesto cara de pocos amigos y aun estoy a la espera de la contestación. Ahora, mi mayor pregunta es, si no soy capaz de conseguir 12000 euros ¿cómo voy a obtener una hipoteca? Lo dicho, que me veo viviendo mi amor debajo de un puente teniendo como única mascota a todos los patitos del Manzanares, y que conste que no tengo nada en contra de las aves.

Ante mi desesperación, y a la espera de que un señor decida si soy o no lo suficientemente pobre para tener derecho a un vehículo, Maromo propuso adelantar el dinero para nuestro bólido tras tener una reunión de lo más seria con su clan familiar. No es una solución que me guste, ni siquiera me siento cómoda con ella, ya que me he acostumbrado a solucionar siempre todos y cada uno de mis problemas sin necesitar la ayuda de nadie y detesto eso de estar en deuda con alguien. Finalmente, y tras un millar de discusiones para hacerme entrar en razón, he aceptado el trato a regañadientes tras escuchar una de esas frases lapidarias que tanto me tocan las narices: "Doña, de vez en cuando tienes que dejarte ayudar por aquellos que te quieren, no eres ninguna súper mujer y ni siquiera necesitamos que lo seas".

Y ahora, mientras espero la entrega del vehículo y la contestación de un banco que se apiede de mí, me encuentro en un gran dilema: ¿qué nombre le pongo al retoño? ¿Alguien me da alguna sugerencia?

Escuchando: Desolation Row - Bob Dylan

Frase del día: Si cada cual se ocupase de lo suyo, el mundo daría vueltas más aprisa - Lewis Carroll

miércoles, diciembre 26, 2007

Vuelta al redil


Tal y como habéis podido comprobar, cuando la Doña decide ponerse tonta no hay quien la gane, porque digo yo, ya que me pongo gilipollas me pongo pero bien ¿no?, que eso de dejar las cosas a medias nunca ha sido lo mío, y además, una tiene todo el derecho del mundo a querer cortarse las venas cuando le venga en gana, eso sí, teniendo siempre mucho cuidado de no pringar demasiado el suelo porque luego viene la mama con esa retaila cansina de: ¡¡¡¡mira como me lo has puesto todo ahora que lo acababa de fregar!!!!

Si es que es lo que le digo siempre a mi loquero "Dájate de mariconadas que ya me levantaré ¡¡¡¡leches!!!, que ni caerme me dejas ya tranquila", y ahí andamos, levantándonos de nuevo.

Y es que diciembre, por lo general, suele ser un mes de mierda para la que subscribe. Yo no sé muy bien por qué, pero todas mis parejas siempre han decidido dejarme en navidad, debe ser que todos ellos presentaban algún tipo de transtorno paranormal en estas fechas (por curiosidad, tendré que mirar en el google si se han llevado a cabo estudios sobre algún tipo de síndrome que lleve el nombre de "Papá Noël" o del "Turrón La Viuda", que nunca se sabe). El caso es que estos días, me los he pasado mirando con desconfianza a Maromo, por si él sufría la misma enfermedad y me tocaba de nuevo comer las uvas con los ojos como dos huevos duros de tanto llorar por el abandono. Parece ser que no, aunque no las tengo todas conmigo, que aun queda por delante una semanita entera.

A parte de mis paranoias generales, en este mes me ha tocado acoplarme a un nuevo trabajo, a unos nuevos compañeros y a un nuevo jefe, que nunca es sencillo y más cuando no tienes ni puñetera idea de lo que haces. Por otro lado, he tenido que despedirme de Lolo (otro amor que me abandona por navidad), pero como bien decía el del taller "Este muchacho ya no da pa´más". No fui capaz de decirle adios, y le dejé a mi hermano la ardua tarea de esperar a la grúa para que se lo llevaran definitivamente. Simplemente, fui incapaz de presenciar su marcha.

Y bueno, que aunque aun me quedan muchas cosas por contar lo iré haciendo en sucesivas entregas, que no es plan de empalagar al personal en unas fechas tan gordas (de tanto comer, claro está). Intentaré ponerme al día con vuestros espacios, aunque me llevará más tiempo de la cuenta, ya he estado echando un vistazo y madre mía, ¡¡¡¡¡¡a qué marchas escribís todos!!!!. He de deciros que os he echado mucho de menos y que mis días han sido un poquito más tristes si cabe por no leeros, lección aprendida para la próxima.

Un besazo enorme y por aquí seguiremos, de nuevo, para dar caña a todo lo que se menea.

viernes, diciembre 21, 2007

Soy un pavo

Definitivamente, soy un pavo.



martes, diciembre 18, 2007

Y sin embargo


Sigo tonta, muy tonta, tanto que casi no me aguanto ni yo. Mi cabeza no para de recordar, de mezclar historias y lo único que consigo con todo esto es desbaratar mi alma. No puedo leer, no puedo ecribir, no puedo pensar con claridad

Y para colmo Lolo ha muerto definitivamente



Y me envenenan los beso que voy dando
y sin embargo cuando duermo sin ti contigo sueño.......

viernes, diciembre 07, 2007

Diciembre eterno


Supongo que como les pasa a muchos, yo soy una de esas personas que odian estas fiestas que se aproximan. Cada vez llegan antes, las luces están colgadas desde noviembre, la televisión no deja de pasar anuncios que muestran la alegría de la navidad y ya se escuchan villancicos en los centros comerciales.

Y sí, ya comienza también eso de la paz y los buenos deseos al prójimo.

Me pregunto donde estaba ese buen rollito hace unas semanas, cuando al acercarme a un mostrador para mirar los productos de una charcutería una mujer me gritó a pleno pulmón "¡¡¡¡donde crees que vas mona!!!! ¡¡¡¡no te cueles ¿eh? que te estoy viendo!!!!", como si la vida le fuera en ello y no hubiera nada más importante en el mundo que 100 gramos de chorizo mal cortados (solo le faltó pegarme con el bolso, y eso que solo estaba mirando). O hace unos días, cuando sin querer tropecé con un señor en la calle y se dio la vuelta para esputar por su boca un "mira por donde vas so payasa". O hace unas horas, cuando Lolo decidió pararse sin previo aviso en medio de la carretera de Burgos (sí, me ha vuelto a dejar tirada) y casi me es imposible llegar al arcén porque todo el mundo estaba más entretenido en bajar la ventanilla y ponerme a parir "¡¡¡Qué te pasa subnormal!!!, ¡¡¡¡quítate de enmedio inúltil!!!!, ¡¡¡¡Si es que mujer tenía que ser!!!!", en vez de intentar comprender el hecho de que si alguien activa las luces de emergencia mientras la velocidad de su coche disminuye es porque algo malo está pasando.

Me resulta curioso que en estos días todo sean buenos propósitos y amor al prójimo y durante el resto del año no seamos capaces de ver toda la violencia, ira y rabia que llevamos en nuestro interior.

El martes falleció la abuela de Sami. No pude acompañarle en su dolor porque además de ser en Málaga, su hermano habría puesto el grito en el cielo. Durante horas, estuve pensando si mandar un mensaje de pésame a mi ex, una que es tonta y no puede evitar que se le ablande el corazón incluso con aquellos que más daño le han hecho. Incapaz de tomar una decisión, llamé a Sofía para conocer su opinión "Haz lo que te salga del corazón nena, independientemente de lo que él vaya a pensar, porque si no lo haces te arrepentirás siempre y no mereces hacerte daño a ti misma". Finalmente lo hice, y de ese mensaje solo he recibido el más absoluto de los silencios, debe ser que el "señorito" solo puede ponerse en contacto conmigo para amenazar o recordarme lo mala persona que siempre he sido. Cuanto odio hay en el alma de algunas personas.

Y aunque me han pasado cosas buenas, he empezado con mi nuevo trabajo y cada vez llevo mejor las riendas de mi vida, estos últimos días ando triste, sin ganas de escribir ni leer vuestros espacios, echando mucho de menos a aquellos que no estarán a mi lado para tomar las uvas y desearles un feliz año. Las luces, los anuncios y los villancicos se encargan de recordármelo a cada momento.

Porque diciembre es muy largo, casi eterno, infinito......

Frase del día: " Solamente aquel que construye el futuro tiene derecho a juzgar el pasado" - Friedrich Wilhelm Nietzsche

Escuchando: Quelqun ma dit - Carla Bruni